29 de marzo de 2011

Salón del cómic de Valladolid 2011 (Parte 2)

Nota: Blogger es una %%$^·$¨para subir fotos y voy a hacer sábado y domingo en 2 entradas.

Sábado. Día 3:

El sábado sabete tocaba inaugurar el salón. Iba a venir el alcalde de la ciudad y la concejala de cultura, así que teníamos que estar allí los invitados para saludar-inaugurar-foto oficial.

Después de desayunar, Ramón nos llamó desde recepción para bajar.

Bajamos Janina y yo, pero Álex y Uxío no contestaban al teléfono. Acabé por subir a la habitación. Por lo visto el teléfono de la habitación no funcionaba. Hasta entonces la cosa daba para guión de peli de miedo. Pero ni sangre ni ná.

Tiramos para el salón, que este año estaba en un recinto bastante más grande, en la Feria de Muestras.

Allí nos reunimos con Carlos, Mónica y Cris Ortega. Luego presentación al alcalde y fuera del recinto a que Carlos y el alcalde dieran un discurso. A posar para los medios y para adentro.

Foto "oficial". Cuánto glamour en tan poco espacio.

Aquí Janina y yo ya fuimos en busca de las amistades que habíamos hecho el año pasado. Rut y Jacobo, Cristian, Cristian (no me repito, hay 2!) y buscando a Lidia, a la que teníamos muchas ganas de ver. Llegó "tarde" y también nos andaba buscando.

Tras saludar a todos y charlar un rato (aka hacer el gilipollas), tocó subir al piso de arriba y ponerse a dibujar.

Este año volvimos a compartir mesa con Jesús Redondo, Lidia Fernández y Cris Ortega. Con los añadidos de Álex, Aurora García, Diana Fernández, Noiry y Javi de Castro (un chaval muy majo que había ganado el concurso del cartel y como premio estaba allí dibujando para el público. Y muy bueno el jodido, echadle un ojo a su blog, lo tengo linkeado).

Éramos más dibujantes que sillas, así que nos turnamos más. Aún así Janina, Lidia, Jesús y yo estuvimos todo el sábado y prácticamente todo el domingo.

Dibujando junto a Lidia. Javi espera pacientemente mientras por dentro se caga en mis muertos.

Javi estuvo esperando sitio un buen rato para sentarse a dibujar. En el momento en que le intenté dejar el sitio me vinieron 3 personas seguidas a las que conocía y querían dibu mío. Le tocó esperar más al pobre. Luego me enteré que sólo iba a estar el sábado y me supo mal.

Cuando Javi me relevó, me dediqué a hacer vida social por allí (dícese de tocar los huevos a Cristian y Jacobo).

La mierda que yo dibujo.

A la hora de comer, fuimos todos los invitados con Carlos, Mónica y Ramón al bar-restaurante japo que habían montado en el salón. Allí nos encontramos con Álex y Uxío, donde se habían tirado la mañana los muy cabronazos (con amor, Álex =P) y con Unai y Josune, que habían llegado del País Vasco hacía poco y decidieron darle también a la cerveza.

Esperando la comida. No pongo foto de ella porque todos intentamos olvidarla. Jesús ya tiene cara de "pero dónde me he metido".

Allí "comimos" todos. Entre comillas porque... bueno, la comida dejaba bastante que desear. Las caras de todos al probar el sushi eran para enmarcarlas. Era como comer un músculo con lepra cubierto de sal. Pero desagradable.

Después Lidia, Jesús, Janina, Javi, Álex, Uxío, Josune, Unai y yo nos buscamos un bar para tomar algo. Álex pidió el best carajillo in the world. El camarero dijo "así se hace un carajillo de verdad", cogió una copa de las pijas (no sé identificar copas, así que la llamo así... de esas de oler vinos) y se puso a mezclar brebajes para acabar flambeándolo. Vaya pedazo de carajillo! No lo probé, pero todos los que lo hicieron coincidían en que era la reostia.

Luego volvimos todos para el salón. Y llenamos las mesas para ponernos a dibujar el resto de la tarde.

¡Álex en la mesa! ¿Saludando? ¡No!¡Pidiendo limosna! La vida del dibujante es muy chunga.

Gracias a Jesús por el dibujo del Capitán Trueno que hizo para mi padre. Se lo enmarqué y regalé por su cumpleaños y le hizo mucha ilusión.

Al acabar la jornada, a descansar un ratillo al hotel.

Para cenar, de vuelta al Camarín. Había una cena en las que éramos 50 personas. Organización, asociaciones e invitados del salón.

En el lado derecho... ¡Ramón! Todo un lord.

Allí Janina y yo nos sentamos junto a Cristina, Aurora, Diana y Noiry con quiénes no habíamos hablado mucho durante el día y tuvimos oportunidad de charlar más. Más o menos... lamentablemente la acústica no era muy buena en el local y apenas nos podíamos escuchar entre nosotros, por lo que acababas hablando sólo con el que tenías a tu lado. Pero bueno, nos lo pasamos bien igualmente.

La cena se alargó con muchos platos y mucha bebida. Una delicia para el paladar y una guarrada para el wáter.

Y al lado izquierdo... ¡Carlos, Cristina, Diana y Aurora!

Tras la cena Janina se fue con nuestras compañeras de mesa al hotel a dormir (¡pero no a dormir juntas, malpensaos! Yo me quedé con Álex, Uxío, Unai, Josune, Jeremi, Moisés, Carlos el hondureño y su novia y buscamos algún local para salir.

Tras dar muchas vueltas encontramos un local con música rockera-punkarra de los 80-90. Otro sitio en el que no oía una mierda a los demás. Y me pasé más rato recibiendo codazos de unos críos dando saltos cantando canciones que otra cosa. Curiosidad, allí los chavales cantando y disfrutando del punk, pero iban vestidos como los pijos de mi barrio (lo cuál tampoco es decir mucho). Pero vaya, los veías de la calle y no te los imaginabas en ese ambiente.

Pequeño homenaje que le hicieron a Jesús Redondo.

Tras echar una copa, Unai, Josune y yo decidimos buscarnos otro local. Acabamos en un bar-discoteca al lado del hotel haciendo una última copa.

Después al hotel a dormir.

22 de marzo de 2011

Salón del cómic de Valladolid 2011 (Parte 1)

Un año más, aquí estoy con la crónica del salón del cómic de Valladolid, al que Janina y yo fuimos invitados otra vez. Allí estuvimos entre el 10 y el 13 de marzo.

Jueves. Día 1:

Este año no fuimos en tren, se lo curraron y nos llevaron en avión. Vale, las paso putas dentro de un avión y pienso que vamos a morir todos en cualquier momento... pero soy vago por naturaleza. La comodidad gana al miedo.Tras un vuelo tranquilo (todo lo que mi agitada mente me permitió) aterrizamos. Las maletas llegaron antes que nosotros a la terminal, así que la salida fue rápida.Allí nos estaba esperando Matías, de la Universidad Europea Miguel de Cervantes (UEMC). Un pedazo de tío al que ya conocimos el año pasado. Este año tenía su coche en el taller y tuvo que venir con el de su madre, por lo que no pudimos disfrutar de su cd de Cowboy Bebop en la radio.

De camino hacia Valladolid por carretera llamó Carlos, de ASOFED. Nos estaban esperando en la pizzería Venetto. Allí nos esperaban Carlos, Mónica, Álex Cal y Uxio. Y es que este año he conseguido que lleven a los amigos Álex y Unai Ortiz (aunque Unai llegaría el sábado).

Del primer día no hay fotos, así que el cartel ya mola. Hecho por Ramón, que cada año le sale mejor. (Pero que no se vaya diciendo, que luego se lo cree).

Álex apareció "por sorpresa" con su amigo Uxío. Acojona ir solo a un viaje así.

Al aparcar el coche sufrí un intento de atentado. Janina y Matías bajaron antes, puesto que iban delante. Al disponerme a bajar... el coche se empieza a mover! Matías no había echado el freno de mano. Janina me asegura que me habría frenado el bordillo a 20 cm y que el coche no iba rápido... pero a Dios pongo por testigo que aquello se movía a 300km/hora. Pero no pudieron acabar conmigo.


Las vistas de nuestro hotel. El hotel molaba, en serio. Pero las vistas eran... no sé, creo que se rodó una escena de Torrente aquí.

Al llegar a la pizzería todos nos llevaban unas cuántas cervezas y vinitos de ventaja. Ventaja que no pudimos (bueno, tampoco quisimos =P) alcanzar durante los 4 días allí.

Álex y Uxio habían viajado en bus desde Vigo. Esa misma tarde Álex tenía una conferencia en la UEMC.

En la pizzería cenamos los 6 (Matías tuvo que irse, estaba rendido). Y muy bien que cenamos. Entre ricos platos, cervecitas, risas y puestas al día.
Después a tomar una última copa a un bar y al hotel a descansar, a la mañana siguiente tocaría dar una charla en la UEMC.


Viernes. Día 2:

El viernes por la mañana, tras el desayuno-buffet en el hotel (a base de chocos y natillas), Ramón (de ASOFED) vino a buscarnos a Janina, Álex, Uxio y a mi para llevarnos a la uni en 2 taxis.

Álex vino con nosotros y Uxio vino más tarde por su cuenta. El pobre tenía la nariz como un surtidor de sangre, cosas del tabique.

Álex, parece que sabe de lo que habla. O planificando algo malvado.


Una vez allí nos presentaron a Ricardo Sir Cámara. Un grandísimo profesional con mil cosas que explicar y al que da gusto escuchar hablar.

Íbamos a dar unas charlas, por el siguiente orden: Yo, Álex, Ricardo y Janina.

Janina y yo necesitábamos un ordenador y proyector, que no habían preparado. Así que Álex tuvo que empezar su charla mientras nos preparaban otra aula.

Mientras Álex seguía con eso, en la nueva aula estuvimos charlando Ricardo, Janina y yo los 45 minutos que tardó la primera conferencia.

Luego ya di mi charla. Bueno, más que charla enseñé los trabajos que había hecho durante el último año (color de The Expendables y Blacksmith, tinta de Banc de Touche y las ilustraciones que estoy haciendo actualmente para IDW).

Empezando la charla. Intenté alargarla mientras pensaba cómo llevarme el proyector a casa sin que se dieran cuenta, pero no funcionó.

El público genial. Los mismos chavales que tuve el año pasado. Ayudan mucho con su interés y preguntas. Un abrazo desde aquí.

Después le tocó el turno a Ricardo. En principio de público iba a tener a estudiantes de periodismo, así que se había preparado una charla adaptada a ese público. Lamentablemente la cosa se torció y el público final era distinto, así que tuvo que improvisar la charla a algo más ameno.

Ricardo en su charla. En realidad no es un hombre borroso, es cosa de la cámara. No sacamos fotos muy decentes ese día.

Para acabar le tocó el turno a Janina, que dio una charla sobre expresividad y líneas de movimiento. Y le salió mucho mejor que el año pasado, ahora andaba más suelta.

Al acabar las charlas fuimos todos con Matías (que estuvo presente en todas aguantándonos, vaya crack) a comer a un Restaurante medieval. Medieval porque tenía una armadura medieval en la entrada. Porque mientras comíamos, sobre nuestras cabezas, una bonita tele con antena3 puesta.

Allí comimos de puta madre (como el resto de días excepto... bueno, ya llegaré) Comimos tanto esos días que al segundo ya teníamos el estómago dando guerra.

La famosa mirada fulminante de Janina


Después una última cervecita con Ramón, Ricardo, Álex, Uxío, Janina y yo, antes de que Ricardo tomara su tren de vuelta a Madrid.

Y luego otra última cervecita en otro bar. Pero ésta la de verdad.

Y ése día nos separamos de Ricardo. Un auténtico placer conocerte, crack. Y espero que nos volvamos a ver.

La tarde poco productiva. Nos separamos todos, cada uno a su casa o habitación de hotel a descansar.

Allí Janina y yo estuvimos con la CNN informándonos de la catástrofe en Japón, que nos pilló en medio del viaje y no nos habíamos enterado de nada.

¿Hace una cervecita? La foto es sin flash, soy así de blanco.

Por la noche a cenar al Camarín. Aquí éramos Janina, Mónica, Carlos, Carlos el hondureño, Ramón, Álex y Uxío, si no me falla la memoria. Nos dieron un festival de platos variados que no nos hizo explotar por poco. Y para acabar la noche, una ronda... o dos... o tres... de chupitos.

Después al hotel a descansar, que a la mañana siguiente tocaba "madrugar" para ir al salón a firmar.

Próximamente la segunda entrega. Prometo (mentira) no tardar mucho.

2 de marzo de 2011

Comission


Encargo que hice hace cosa de un mes para un particular.

Mientras, llevo mes y medio co-ilustrando, junto a otros dibujantes, un libro para IDW. Ahora mismo llevo 57 ilustraciones totalmente acabadas. 13 más pendientes de acabar y algunas más que vendrán.

Durante este tiempo también estoy entintando el #3 de Banc de Touche, para la editorial Kantik. Con fantástico dibujo de Albert Carreres. ¡Quedan pocas páginas para acabar el álbum!